México, «hasta la madre” de los narcos

Por Observador Global. Encabezadas por el poeta Javier Sicilia, unas 500 personas llegaron a la zona sur de Ciudad de México en la segunda jornada de una marcha silenciosa que -arrancó el jueves en Cuernavaca y que el domingo- culminará en una gran concentración en la capital.

La llamada «Marcha por la Paz con Justicia y Dignidad» recorre los 90 km que separan la turística Cuernavaca de la capital, para reclamar a los cárteles -que cesen en sus cruentas pugnas- y al gobierno -que deje de utilizar al Ejército para combatirlos-.

Al concluir esta segunda jornada de protesta, considerado por muchos como un símbolo de las víctimas de la violencia ligada al narcotráfico, sus organizadores acusaron a los partidos políticos de ser corresponsables de la violencia que azota a México.

«Estamos hasta la madre, hartos, del crimen, queremos que esto termine, pero también estamos hasta la madre de las instituciones, empezando por los partidos políticos. Han sido omisos, están corrompidos y se han blindado y hecho leyes para protegerse sus impunidades», aseguró el poeta Javier Sicilia.

Quienes convocaron a esta marcha esperan que más personas se unan en el trayecto, que continuará este sábado a lo largo de una de las principales avenidas de la capital y para el domingo culminará en una gran concentración contra la violencia en el Zócalo, plaza central de la capital, marcha que buscaran replicar en otras localidades del país.

El sábado, la marcha se instalará en el campus de la Universidad Nacional Autónoma de México, donde pernoctará para partir muy temprano la mañana del domingo.

Otros grupos de manifestantes viajan de distintas partes del país para sumarse a la concentración, entre ellos un centenar de inmigrantes centroamericanos y activistas, quienes denunciaron que recibieron amenazas de hombres armados a su llegada a Orizaba, al este del país.

«Tres hombres en una camioneta amagaron con un arma a una pareja de migrantes e intentaron secuestrar a la mujer pero finalmente pudieron huir», explicó el activista mexicano Rubén Figueroa.

MÁS FOSAS COMUNES

Once cadáveres fueron descubiertos durante excavaciones de fosas clandestinas en la ciudad mexicana de Durango, con lo que suman 155 los cuerpos desenterrados desde el 11 de abril, según informó la fiscalía local.

Las excavaciones, realizadas por militares en una zona habitacional de Durango, continuarán durante este domingo. Durango es escenario de disputas entre distintos cárteles de las drogas.

Según la fiscalía, las víctimas tendrían como mínimo un año de muertas, pero no las ha identificado ni ha ofrecido información sobre los responsables de esas muertes, aunque se sospecha que pueden ser víctimas del crimen organizado.

Se trata del segundo gran hallazgo de fosas desde abril en el norte de México. En el poblado de San Fernando, Tamaulipas, se han extraído 183 cadáveres en 40 fosas clandestinas que corresponderían a emigrantes secuestrados en autobuses cuando se dirigían a Estados Unidos.

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